Gobierno de Brasil por frenar delitos graves en redes sociales

Brasilia, 19 abr (Prensa Latina) El Gobierno de Brasil evalúa hoy la presentación de dos propuestas al Congreso Nacional, que se crean como alternativas para la regulación de las polémicas redes sociales.    Según la estación televisiva CNN Brasil, el tema volvió a ser asunto urgente al interior de la administración del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, con énfasis en un frente de defensa y seguridad de la niñez y adolescencia en el entorno digital y otro en los mercados.
Los textos esperan la palabra final de Lula y uno de los proyectos en manos de la Casa Civil es un marco legal para proteger a los usuarios de servicios digitales.
Tal documento tiene como objetivo responsabilizar a los proveedores de Internet y proteger a los usuarios.
Fuentes escuchadas por CNN indicaron que la preocupación no es solo el contenido de terceros y que las discusiones involucran una perspectiva amplia más allá de las plataformas.
Las reglas para los proveedores se basan en la idea de que son responsables de todo el contenido ilegal que circula en las redes y están obligados a monitorear activamente los casos de delitos graves.
Incitar al suicidio sería un ejemplo de contenido que necesita una vigilancia activa para evitar que circule por Internet, al igual que los casos de racismo.
En situaciones ilegales, pero que aún no entran en esta categoría de gravedad, se propone que, una vez que la empresa sea denunciada por un usuario o autoridad o la propia plataforma identifique algo incorrecto, se elimine el contenido. Un ejemplo sería compartir imágenes de desnudos.
También el Gobierno sigue con interés el resultado del juicio sobre el llamado Marco de Derechos Civiles en Internet en la Corte Suprema, que exige en su artículo 19 que exista una orden judicial previa para la eliminación de contenidos.
Las propuestas son una alternativa ampliada al Proyecto de Ley de Noticias Falsas, cuyas discusiones quedaron enterradas en la Cámara de Diputados debido al antagonismo de las grandes empresas tecnológicas y la base del exmandatario Jair Bolsonaro en esa asamblea.
Recientemente, una encuesta no oficial realizada por el Instituto DimiCuida reveló que al menos 56 niños y adolescentes murieron o resultaron heridos tras participar en retos en Internet en los últimos 11 años en el gigante sudamericano.
Las estadísticas afloraron a partir de informaciones de prensa e informes de los padres, y después de conocerse que la niña Sarah Raissa, de ocho años, murió al participar en el llamado Desafío del desodorante, en Brasilia.
Fue encontrada el jueves sin signos vitales por su abuelo junto a un frasco de desodorante. De inmediato se trasladó a un hospital después de inhalar gas del cosmético en aerosol. La aspiración le provocó un paro cardiorrespiratorio.